En muchas ocasiones, se está acostumbrado a buscar amor afuera: en la aprobación de los demás, en los logros alcanzados o en los elogios que validan. Sin embargo, es importante reconocer y recordar que el amor más transformador es el que nace de adentro. El que se construye cuando eliges verte con empatía, cuidarte sin exigencias y aceptarte a ti mismo sin condiciones.
No puedes construir una vida plena desde el rechazo a ti mismo. Amarte no significa no cambiar, significa crecer desde el respeto y la compasión. Recuerda que el amor propio implica reconocerte, aceptarte y respetarte.
El amor propio no se trata de gustarte todo el tiempo, sino de acompanarte con la compasion y empatia que brindas a los demas en sus momentos dificiles. No necesitas estar en tu mejor versino para tratarte con amor y cuidado. Recuerda que amarte es estar contigo mismo sin condiciones y filtros.
Tu valor no depende o se mide por tu productividad, tus logros o la visión que los demás tienen de ti. Amarte incondicionalmente te ayuda a entender que eres suficiente tal y como eres, incluso en tus momentos vulnerables.
Te comparto tres ejercicios que puedes practicar para cultivar tu amor propio...
Colócate la pulsera, pon una mano en tu pecho y repite:
"Elijo aceptarme y amarme como soy".
Hazlo cuando sientas que no eres suficiente o te juzgues con dureza.
Escríbete una carta desde el amor más honesto. Agradece por lo que eres, reconoce tus esfuerzos y prométete cuidado. Guárdala en un espacio seguro y léela cuando lo necesites.
Reflexiona sobre tu diálogo interno. ¿Qué frases podrías transformar para que sean más amables y compasivas contigo? ¿Cómo se siente cuanto te hablas con amor y compasión?
Amarte no es un destino, es una práctica diaria. La pulsera emocional de Amor Propio es un recordatorio constante de que mereces hablarte con amor, cuidarte sin culpa y reconocer tu valor, todos los días, en cada pequeño acto hacia ti mismo.
Adquiere otra pulsera emocional de nuestra colección de pulseras (6) en el siguiente enlace: Colección Pulseras Emocionales